En otro ejemplo de cómo la blogosfera se adelanta a los medios noticiosos tradicionales, El Nuevo Día publica una historia sobre los posibles vínculos del fenecido empresario canadiende Adam Anhang, quien fuera asesinado presumiblemente por encargo de su esposa. Así había sido adelantado en el artículo "Jorge de Castro Font: cuando el río suena" y en "El Vocero le da la razón a Guavate Press.
Ahora nos dice El Nuevo Día:
"Son barbaridades lo que ha dicho esa mujer. Nunca he intervenido en asuntos del Gobierno con Adam Anhang y nunca recibí dinero del marido de Áurea Vázquez". Así reaccionó el senador Jorge de Castro Font a las declaraciones de Áurea Vázquez Rijos, viuda del canadiense Adam Anhang, quien dijera en entrevista con este diario que el asesinado empresario le pasaba "mensualidades" al Legislador para que interviniera en la otorgación de permisos que necesitaba.
El asunto mereció una primera portada de El Nuevo Día en su edición dominical, la más importante de la semana. Por supuesto. A el periódico le conviene hundir a De Castro Font antes de que acabe de hundir a Luis Fortuño, el candidato de dicho periódico.Guavate Press es una agencia noticiosa ubicada en una de las lechoneras de Guavate y obtiene su información de los comensales que, hartos de cuajo, cueritos y cerveza, comienzan a contar los bochinches del país para ver si se les alivia la panza.
Puede ser que De Castro Font este ocultando la corrupción del PNP, pero se entiende bien claro que esta persecución es dirigida por Fortuño y el escudrón que triciono a Rosselló.
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