Hacía como dos años que no iba a Ponderosa a comer pero Patricia insistió. Ella quería comer papitas fritas con la carita feliz. Es que sólo tiene cuatro años. Tratamos de convencerla para ir a otro lugar pero las papitas felices ganaron. En el "salad bar" de ese lugar siempre he comido exactamente lo mismo: garbanzos con trocitos de remolacha, queso "cottage" y pedacitos de jamón con queso amarillo por encima. Esta vez volví con mi combinación pero cuando cogí los pedazos de jamón me di cuenta de que estaban congelados. Y no quiero decir bien fríos, sino congelados con pedazos de hielo adheridos.
Le dije a la muchacha que atendía el bar sobre el problema. Me miró raro y me contestó que así estaban en la bolsa plástica de la cual los sacó. "-Pero están congelados"-, le dije. -"Habría que calentarlos en un microondas"- , me contestó. Miré de reojo a todos lados a ver si ni estaba en un programa de cámara oculta.-"¿Los podrías calentar?"- le pregunté.-"Si usted quiere se los calentamos"- " NO ES QUE SI QUIERO, ES QUE ESTÁN CONGELADOS", le dije alzando la voz. -"Considero una falta de respeto que como cliente usted piense que yo me voy a comer eso congelado!"- Me miró como si no entendiera mi punto.
-"Si quiere puede hablar con la gerente"- me dijo. Le contesté que por supuesto quería hablar con la gerente. Si el resto de la gente está satisfecha con comer jamón congelado allá ellos. Yo ni siquiera lo quería caliente, sólo descongelado, por el amor de Dios. Me fui a la mesa a esperar por la gerente. Mi familia me miraba como si yo estuviera poseído. Me acusaban con sus miradas de crear problemas en público. Hasta Camila, la de año y medio, me miró mal.
Llegó la gerente y me dijo: -"Tengo entendido que tuvo un problema con el jamón"- . -"Está congelado"-le dije. -"Es que así es que sale en la bolsa pero tomaremos en consideración su pedido"- me espetó. Sentí que estaba en la zona desconocida. Algo se había desencajado en el Universo y el resultado era una conspiración para que yo comiera jamón congelado.
No sé si tenga que volver a Ponderosa a complacer a una de mis hijas. Pero si lo hago llevaré mi propio jamón en una bolsa zip-lock.
Es algo automatizado, como que se es incapaz de razonar o algo asi:
ResponderBorrar"el jamon sale asi de la bolsa"
"eljamon sale asi de la bolsa"
"el jamon sale asi de la bolsa"
edwin contesta pausadamente, como deletreandole el pensamiento: YYYYYYYYYYYYYYYYY????? No eres capaz de pensar que que salga asi de la bolsa NO significa que tengas que CONFORMARTE con el hecho y te lo TENGAS que comer asi y para colmo pretendas que los demas tambien lo hagamos!!!
"el jamon sale asi de la bolsa" "el jamon sale asi de la bolsa""el jamon sale asi de la bolsa"(como un disco rayado)
ya demostrando su molestia edwin le grita: hay un cerebro ahi dentro o estoy hablando con un robot que solo sigue ordener especificas y no es capaz de razonar carajo?!?!
"el jamon sale asi de la bolsa"
edwin sin mas paciencia que Aponte borracho y molesto: me cago en tu madre y padre y en los de la condena'bolsa esa tambien!!! (coje los jamones congelados y se los mete con el puño en la boca a la gerente, como se estofa al pavo de Accion de Gracias)
SALUDOS EDWIN!!!
Perla:
ResponderBorrarMe conoces muy bien porque ese fue el pensamiento que pasó por mi cabeza. Pero, ¿te imaginas los titulares?
Ya me habia percatado de eso en otro ponderosa, no le di mucho color pero ocurre. Es un descuido y definitivamente la respuesta no es satisfactoria. El churrasco sale crudo de la bolsa, y lo calientan. Q les cuesta poner a descongelar el jamon?
ResponderBorrarSaludos:
ResponderBorrarHace un año aproximadamente me pasó algo similiar en esa misma cadena de restaurantes. En mi caso me sirvieron alitas frias... pero no frias como si las huviesen cocinado hacía una hora, sinó como si las huviesen acabado de sacar de la nevera, y lo más chistoso de todo es que el plato estaba caliente. No regresé la comida porque ya he escuchado demasiadas historias de horror relacionadas con eso, pero ya no volví a ese lugar.
Edwin,
ResponderBorrarMe hiciste reír de nuevo.
Lo más curioso es lo que te dice la gerente: "Tengo entendido que tuvo un problema con el jamón." Con el "Usted" omitido pero implícito.
O sea que no hay un problema con el jamón. El restaurante no tiene un problema con el jamón. Nadie tiene problemas con el jamón. El jamón no es tan siquiera parte de la situación... sino usted...
Tu Edwin, que eres un problemático y osas quejarte de algo que todos aceptan... jamón congelado. El jamón congelado que representa nuestra dejadez.
Y es que se necesita muy, muy, pero que muy poco para hacer las cosas bien, pero se necesita menos aún para hacer las cosas mal.