Me acabo de enterar de una medida que sometió la representante Albita Rivera para acabar con la violencia doméstica y las agresiones sexuales y tengo que decir que hay esperanza para este país. Yo, que he sido un crítico acérrimo de los legisladores que disparan medidas a diestra y siniestra, me tengo que quitar el sombrero ante esa señora (y eso que no uso uno).
La Sra. Rivera se ha inventado un mecanismo genial para evitar que una mujer acosada por su pareja sea maltratada. Todo lo que tiene que hacer es cambiarle la tablilla a su carro. Así, con una matrícula nueva, el acosador no podrá encontrarla y asunto resuelto. Específicamente la Sra. Rivera propone que las mujeres acosadas puedan cambiar su tablilla sin costo alguno. Gratis. De esta forma cuando su pareja la amenace con pegarle tres tiros la próxima vez que ella reclame sus derechos, sólo tendrá que llegar a su oficina del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) más cercana, llenar los documentos, hacer la fila, obtener la nueva tablilla, quitar la vieja en el estacionamiento, poner la nueva, montarse en su vehículo y ya. Ni la máscara de Clark Kent, que sólo le tapaba los ojos, sería tan efectiva.
El acosador, que la ha seguido todo el tiempo al DTOP, verá cuándo ella se monte en el vehículo. La seguirá reconociendo el carro que ella siempre ha conducido. Notará las marcas particulares como la parte hundida del bonete y la rayita en la pintura del baúl. Pero de pronto, en medio de su persecusión, sus ojos se posarán sorprendidos sobre la matrícula del vehículo y se dará cuenta de que los números y letras de la tablilla no son los de su acosada.
Por supuesto que el acosador, al notar su error, regresará al sitio original a buscar a su pareja y seguir con su acoso. La perseguida se ha salvado gracias a la habilidad innata, nunca antes descrita, que tienen los acosadores de memorizarse los números de tablilla de sus vehículos y de sus parejas. Esa es una característica única de los acosadores pues la mayoría de la gente "normal" no sabe cuáles son los números de su tablilla.
No sé de qué rejoyas cerebrales la Albita sacó esta idea. Lo que sé es que ella ya había sometido este proyecto en el 2006 y por alguna razón no prosperó. En aquel entonces le escribí una carta pero aún no me la ha contestado. En ella le sugería otros mecanismos para proteger a nuestras víctimas de violenca, tales como pintar la casa de otro color y comprarles una peluca.
A lo mejor tiene mejor suerte con esta Legislatura.
La Sra. Rivera se ha inventado un mecanismo genial para evitar que una mujer acosada por su pareja sea maltratada. Todo lo que tiene que hacer es cambiarle la tablilla a su carro. Así, con una matrícula nueva, el acosador no podrá encontrarla y asunto resuelto. Específicamente la Sra. Rivera propone que las mujeres acosadas puedan cambiar su tablilla sin costo alguno. Gratis. De esta forma cuando su pareja la amenace con pegarle tres tiros la próxima vez que ella reclame sus derechos, sólo tendrá que llegar a su oficina del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP) más cercana, llenar los documentos, hacer la fila, obtener la nueva tablilla, quitar la vieja en el estacionamiento, poner la nueva, montarse en su vehículo y ya. Ni la máscara de Clark Kent, que sólo le tapaba los ojos, sería tan efectiva.
El acosador, que la ha seguido todo el tiempo al DTOP, verá cuándo ella se monte en el vehículo. La seguirá reconociendo el carro que ella siempre ha conducido. Notará las marcas particulares como la parte hundida del bonete y la rayita en la pintura del baúl. Pero de pronto, en medio de su persecusión, sus ojos se posarán sorprendidos sobre la matrícula del vehículo y se dará cuenta de que los números y letras de la tablilla no son los de su acosada.
Por supuesto que el acosador, al notar su error, regresará al sitio original a buscar a su pareja y seguir con su acoso. La perseguida se ha salvado gracias a la habilidad innata, nunca antes descrita, que tienen los acosadores de memorizarse los números de tablilla de sus vehículos y de sus parejas. Esa es una característica única de los acosadores pues la mayoría de la gente "normal" no sabe cuáles son los números de su tablilla.
No sé de qué rejoyas cerebrales la Albita sacó esta idea. Lo que sé es que ella ya había sometido este proyecto en el 2006 y por alguna razón no prosperó. En aquel entonces le escribí una carta pero aún no me la ha contestado. En ella le sugería otros mecanismos para proteger a nuestras víctimas de violenca, tales como pintar la casa de otro color y comprarles una peluca.
A lo mejor tiene mejor suerte con esta Legislatura.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrar¿Será que nunca podré escribir algo positivo en mi blog de la legislatura? Es frustante ver como se pelean el puesto para ver cual es más inepto. Que gané el mejor!
ResponderBorrar¿La máscara de Clark Kent? ¿No son espejuelos los que usa el alter ego de Súperman?
ResponderBorrarA la verdad que esta gente de la legislatura penepé tienen una competencia sin cuartel a ver quien es el más ridículo y cabecicerrao. Y es taaaan difícil decidir.
ResponderBorrar